El control de la máquina, por principio, es capaz de memorizar para cada perfil los valores de ajuste de la máquina. Si en un momento posterior se desea volver a producir un mismo perfil, el control indicará los valores de ajuste. Esto contribuye a que el proceso de ajuste sea más sencillo. Para el operador significa una mayor seguridad, dado que se minimiza el riesgo de cometer errores.